Belén Esteban no ha tenido ningún problema en confesar públicamente uno de los datos hasta ahora desconocidos de su relación con Miguel. Haciendo una vez más gala de esa naturalidad que tanto le caracteriza, 'la princesa del pueblo' ha desvelado lo que más le gusta a su marido.
Este miércoles, 15 de febrero, Sálvame ha tenido la oportunidad de dar visibilidad al duro testimonio de María Añó, una joven deportista de élite que, desde muy joven, ha visto como su vida se convertía en una auténtica pesadilla.
Según ha relatado esta exgimnasta rítmica, durante su estancia en el club deportivo que la vio crecer, tuvo que soportar todo tipo de vejaciones e insultos por parte de sus entrenadoras.
Una de las cosas que más llamaron la atención de Belén Esteban y el resto de colaboradores fue la rutina diaria que todas las gimnastas tenían que llevar para poder seguir formando parte del equipo.
Esta joven aseguró que, tanto a ella como al resto de sus compañeras, las pesaban por la mañana y por la tarde para controlarles el peso. Además, María confesó que en más de una ocasión la llamaron "celulítica" cuando tan solo pesaba 38 kilos.
Tras este duro testimonio, la deportista quiso satisfacer a Jorge Javier Vázquez mostrando sus habilidades con los diferentes objetos que se utilizan en la gimnasta rítmica.
Y fue justo en este momento cuando Belén Esteban dejó a toda la audiencia de Sálvame sin palabras al confesar un íntimo dato sobre su vida conyugal con Miguel Marcos.
Belén Esteban hace una inesperada revelación
Belén Esteban se ha vuelto a convertir en el centro de todas las miradas tras confesar uno de los secretos más personales de su matrimonio con Miguel.
Y es que, después de la pequeña exhibición de María Añó en Sálvame, 'la princesa del pueblo' se puso en el centro de plató para mostrar sus dotes para el hula hoop.
"¡Cuidado que viene!", advirtió Jorge Javier Vázquez, mientras que Belén Esteban dejó sin palabras a todos sus compañeros con el movimiento de sus caderas.
"¡Qué bueno!", aseguró Lydia Lozano, mientras sonaba de fondo la característica saeta que el programa le ha adjudicado a la de Paracuellos.
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Fue en este momento cuando el presentador de La Fábrica de la Tele se levantó de su sofá para admirar las habilidades de Belén Esteban. "Imaginaros cómo tengo a mi Miguel con este movimiento", aseguró la tertuliana, provocando las risas de todos los allí presentes.
Belén Esteban se entera de lo mal que lo tuvo que pasar
Belén Esteban no podía salir de su asombro tras conocer todos los detalles sobre la estancia de María Añó en su primer club deportivo.
Según relató esta deportista de élite, sus entrenadoras les "restringían alimentos", como la pasta o el plátano, para que no engordaran. Además, quiso confesar ante toda la audiencia de Telecinco una de las anécdotas que le marcaron de por vida.
Y es que, cierto día, una de sus entrenadoras la "acorraló" y le advirtió que si le contaba a alguien la escasa alimentación que llevaban, pasaría "algo grave".
Pero, por si todo esto fuera poco, la joven también compartió con Belén Esteban y sus compañeros la dieta que sus entrenadoras les hacían seguir:
"Solo podíamos cenar yogur, pagábamos dietas por ir a competición y ese dinero se lo quedaban para ir a restaurantes y comer. A nosotras nos daban un yogur y sopas, solo con caldo. Pasábamos hambre".
Aunque, sin duda, uno de los peores episodios se produjo durante uno de los campeonatos. "A nosotras nos dieron el hueso del pollo y nos dijeron que no merecíamos cena porque habíamos fallado".